Sobre "El retrato de Dorian Gray" Oscar Wilde dijo en cierta ocasión que "en la primera novela de cada autor el personaje principal debe ser o Cristo o el Fausto". En ambas historias, el protagonista trata de enamorar a una mujer, matando no sólo a ella, sino también a su hermano, quien busca venganza. Wilde afirmó que la idea de "El retrato de Dorian Gray" es "vieja en la historia de la literatura", pero que él le había dado una nueva forma.
Pues algo parecido puede llegar a pasar con el concepto en el arte pictórico, retratar no es nuevo, es un género muy viejo en la historia del arte, pero siempre cabrá la posibilidad de hacerlo de una nueva manera que el artista la hace propia o peculiar. En este encargo, retrato a un señor de cierta edad en una posición de apoyo sobre una silla con el brazo descansando en ella, apoyándose con la otra mano en su propia pierna, como si su edad, su peso lo obligase a sujetarse bien. La inestabilidad, el vértigo o la inseguridad del espacio y el entorno a veces nos hacen tomar ciertas poses o posiciones que nos reflejan de alguna manera, el pintor ha de saber captarlas.