Retrato de Salomé Guadalupe en el estudio / Óleo sobre tela 100 x 100 cm / Pintor Alejandro Cabeza
Colección particular
De ojos grandes −ojos que siempre me dicen cosas− y mirada penetrante. De porte elegante y seductor. Es posible que el retrato tenga siempre un algo más que encierra misterio, secretos que no están a nuestro alcance. Una visión rápida de mujer difuminada, con contornos fugaces, indefinidos; que redescubra la otra parte de nosotros mismos, la que tal vez pase desapercibida, la que no se muestra, la que no vemos porque queda oculta. Quizás.... ni siquiera la otra parte perfecta del espejo sea nuestra verdad. La verdad es la que no se refleja: su bondad, su amor a la naturaleza, su mente prodigiosa que siempre está presente, su nobleza, su ingenio, su educación. Cualidades que la hacen, más que nadie, digna de elogio y admiración.
Su cabello suelto lo guardo celosamente para mí. Es otro secreto más −y hay tantos− que hay que redescubrir. Como todo su mundo, que es solamente suyo. Aunque su mundo es todo el mundo. En su reino sólo podremos entrar, para conocer a esa criatura, leyéndola; entendiéndola.
Alejandro Cabeza
Poesía
Relato
- Volverá el aroma al guardián de las espinas
- La estirpe de Judith
- Las costuras del alma
- La imperfección del círculo
- El ángel herido
- Para que sobreviva la estela en el mar de arena
- Bajo la superficie
- El amor en tiempos cibernéticos
- El duende que tuvo que crecer
- Bajo el signo del naufragio
- Sacrificio: el evangelio según Poncio Pilatos
- El último viaje
- Volverá el aroma al guardián de las espinas